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Feo a más no poder era el nombre de Rábano Mauro, un cierto obispo del siglo IX, sin embargo la idea que tuvo fue bien hermosa: se le ocurrió llamar a María Magdalena “la apóstola”, porque “apóstol” significa enviado, y ella fue la enviada por Jesús para anunciar a todos los demás su resurrección. Aquella mañana, en efecto, Magdalena se había levantado muy temprano para ir al sepulcro, y al llegar se encontró con Jesús en persona, que le dijo: ve a mis hermanos y anúnciales que subo a mi Padre y vuestro Padre, a mi Dios y a vuestro Dios (Juan 20). De este modo fue enviada a los enviados, y se convirtió así en apóstola apostolorum, apóstola de los apóstoles. Ella, una chica, fue la elegida para librar a ellos, los varones, de su abatimiento y su miedo. La Noticia más Grande de la Historia tuvo aquella mañana rostro de mujer.
Un rostro no muy acicalado, la verdad, pues en aquel momento no estaba para florituras. Agitada y a todo correr llegó como pudo, desmelenada y radiante de alegría, hinchados los ojos del mucho llorar y poco dormir, el vestido desaliñado y mal recogido, el rostro demudado por la emoción, mezclando risas con hipidos.
Con semejante pinta, como era de esperar, los discípulos no la creyeron, y juzgaron sus palabras como un delirio (Lucas 24). Tristes y llorosos (Marcos 16), no estaban para asimilar tales noticias, y menos de una mujer. El miedo, que les hacía cerrar a cal y canto aquella casa, también agarrotaba sus corazones. “Pobrecilla, ha tenido un shock, —pensaron— las chicas siempre tan emocionables, ya se sabe, el sexo débil, venga, hija, cálmate, tómate una tila”.
Y sin embargo nunca la Magdalena fue tan fuerte ni tan sabia como aquella mañana. Ni tan femenina, ¿pues qué es una mujer sino la emisaria de la Nueva Humanidad, el signo de la Iglesia? Y si además rebosa fe, ¿cómo no parecerá su testimonio un delirio a los tristes y cenizos? Provocación y escándalo ha sido y será siempre la coherencia cristiana, y si alguien se molesta o no lo entiende, que vaya espabilando. De hecho aquella tarde Jesús se presentó ante los discípulos y les reprendió su dureza de corazón por no haber creído a los que le habían visto (Marcos 16). ¡Reprendió a los chicos por no creer a las chicas!
“Las chicas”, sí, en plural, porque había otras junto a Magdalena, santas y valientes. Y no me refiero sólo a Salomé, Juana o María de Cleofás, sino a vosotras, las lectoras de estas líneas. Porque si de verdad os acercáis a Jesús también os sentiréis implicadas en esta aventura de llevarlo a todas partes, rompiendo esquemas, descorriendo cerrojos, sacudiendo conciencias. ¿No está escrito en el Génesis que será una mujer quien aplaste la cabeza del diablo? Unidas a la Virgen, pues, tenéis una fuerza secreta y una misión única dentro de los planes de Dios, sois proféticas y atómicas.
Las cualidades de esta Mujer Nueva las resumía Juan Pablo II en la expresión genio femenino (Carta a las Mujeres, 9), que consiste en un pesquis especial para todo lo humano, para captar y remediar las miserias del corazón. ¿Quién negará que en esto las chicas nos aventajáis a los chicos?
En los 10 puntos de este folleto hemos procurado trazar el perfil de esta mujer nueva, apóstola del nuevo milenio, que pisa fuerte en los pasillos del colegio, el instituto, o la universidad. Son ideas rápidas y entrecortadas, como letras de una canción, para que las medites personalmente y hagas un poco de examen de conciencia. Hemos pensado sobre todo en aquellas chicas que imparten catequesis, y también en las que se preparan para la Confirmación, y por tanto están a punto de convertirse en miles Christi, soldados de Cristo.
Pablo Prieto
Sacerdote
1
Trata a Jesús,
búscalo con rasmia, sé tozuda,
no pares hasta dar con él,
no te quedes en segunda fila, empanada,
viéndolo de lejos,
conociéndolo de oídas,
no lo dejes pasar, ¿mira que si lo pierdes?,
he aquí que estoy a la puerta y llamo (Apocalipsis 3),
sin él te angustias, te engañas, te rompes,
sin ti no soy nada, sin ti niña mala,
por eso persevera en la oración, día tras día,
aunque te falten inspiración, ideas, ganas,
¿cómo vas a aficionarte a su Persona sin este roce continuo?
¿cómo sentirás su tirón, su flechazo, su encanto?,
agrégalo como Amigo, descórrele tus cerrojos,
hazlo tu confidente, tu refugio, tu búnker,
tu imán, tu adicción,
¡enamórate!,
Dios se ha hecho de tu misma pasta,
principio y fin de tu vida,
hombre clave y clave del hombre,
único que puede saciar tu corazón
indómito y traicionero,
ha taladrado la Historia hasta llegar a ti,
¿le dedicas un rato al día sólo para Él?,
¿siquiera un cigarro para hablar de tú a tú?,
¿dejas que te organice la vida?,
quien no recoge conmigo desparrama (Lucas 11),
¿repostas combustible en el Sagrario?,
¿lees su vida?,
una paginica al día, tampoco es tanto,
una loncha de Evangelio, ñam ñam,
rica en calorías,
¿y por la calle, te mantienes siempre online?,
el amor crece diciéndose, aumenta declarándose,
¿o tu oración es de chicha y nabo,
sin garra ni compromiso ni pasión,
oración basura?,
no seas rácana, no le des las sobras del día,
esos cuchicheos distraídos mientras concilias el sueño,
para encontrarse con Cristo hay que chillar como la Cananea,
como Bartimeo que brincó a ciegas, tirando su capa sobada y piojosa,
o Lázaro, que salió a rastras de su cueva,
liado y pestoso como estaba,
o Zaqueo, encaramado al sicómoro como un pajarraco,
pío pío,
échale imaginación, coraje, ternura, no te resignes,
Cristo fascina, cautiva, encanta, electriza, enamora.■
2
Vive la misa,
súbete a la Pascua del Señor,
su pasión, muerte y resurrección,
ese cohete de la Tierra al Cielo,
de la muerte a la vida,
de la esclavitud a la libertad,
cuando llegó la hora de pasar de este mundo al Padre,
habiendo amado a los suyos,
los amó hasta el extremo (Juan 6),
¡eso es la misa!, el colmo, el novamás,
la pasada de Dios,
te plantas en el Calvario,
ahí tienes al Señor agonizando por ti,
tal cual,
dando su último aliento,
su Sangre preciosísima,
librándonos del pecado, de la muerte y del diablo,
ofreciendo al Padre, por el Espíritu, todo lo nuestro,
como hostia viva, santa, grata a Dios,
tu familia, tus amigos, el estudio, los agobios,
el deporte, la música, el cine, la ropa,
todo lo atraeré hacia mí (Juan 12),
¿qué descargas sobre el altar?,
¿qué le llevas cada domingo?,
¿organizas tu finde en torno a la misa?,
porque si quieres a Jesús tienes que moverte, maña,
ir, asistir, participar, ¿qué te creías?,
como hizo el leproso, el ciego, la cananea,
en vez de repanchingarte en casa, qué morro,
un domingo sin misa es un cuerpo sin alma,
domingo fantasma, sin pena ni gloria,
o estás en el Calvario o estás en Babia,
¡endomíngate!
la misa es tu password para el Cielo,
tu mapa para llegar,
la provisión para el camino,
contiene todo lo que hay que hacer
y toda la fuerza para hacerlo,
el qué, el cómo y el para qué de tu vida,
¿acaso no es la boda sin fin entre Dios y los hombres?,
lo que Dios ha unido el hombre no lo separe,
Jesús y la Iglesia unidos forever,
Jesús y la Misa una sola carne,
su Corazón palpita sobre el altar, ¿no lo notas?,
pum pum,
en cada signo, gesto, ceremonia, resuena su voz,
mi banquete está preparado, venid a las bodas (Mateo 22),
ven sin falta el domingo,
no me falles,
eres la Novia, representas a la Iglesia,
como mi Madre Santísima
al pie de mi cruz ■
3
Confiésate
a saco paco, con valentía y decisión,
sin maquillar tus miserias ni excusarlas,
al viejo estilo del leprosito,
Señor, si quieres puedes limpiarme (Lucas 5),
déjate salvar, actualiza tu bautismo, update,
entra en el Costado de Cristo o sea el confesionario,
vuelve a los brazos de tu Padre Dios,
a su misericordia que sabe a beso,
no vale autoconfesarse,
enjuagarse en la propia palangana, como Pilato,
es más fácil engañarse que superarse,
tú en cambio caña al pecado,
al suicidio lento de la tibieza,
así afinarás tu conciencia,
madurarás como persona,
romperás tus cadenas,
¿acaso no está escrito la verdad os hará libres?,
captarás mensajes del Espíritu Santo, sus sms,
que ahora ni te hueles, maña, porque vas de listilla,
te fías demasiado de ti misma,
déjate orientar por el sacerdote, ten dirección espiritual,
sólo te conoces cuando te das a conocer,
para vencer al diablo, padre de la mentira,
le darás en los morros, como la Virgen,
te parecerás a Ella cada vez más,
te sacarás de dentro tu mejor tú. ■
4
Fórmate,
ahonda, lee, asesórate,
no te tragues los tópicos, las ideas consabidas,
los clichés de moda, lo políticamente correcto,
piensa por ti misma,
sin formación te arrastra la corriente,
te vuelves manipulable y borreguil, bee,
¿y si acabas metida, sin darte cuenta, en el patio del Pretorio?,
la chusma gritaba ¡crucifícalo, crucifícalo! (Marcos 15),
¿y si acabas, a lo tonto a lo tonto, negando a Jesús,
dejando que lo echen de todas partes,
las leyes, las costumbres, el arte, la educación,
por callarte, por no explicar, por no influir?,
por eso ante todo estudia,
cúrrate el curso,
día a día, chapa que chapa,
¿no es acaso la materia prima de tu santificación?,
ofrecido a Dios se vuelve oración poderosa,
excavadora para remover el mundo,
cancha de todas las virtudes,
sin buenas notas ¿quién te creerá?,
alimenta tu fe, no la dejes morir anoréxica,
tus amigos te preguntarán sobre Dios cuando menos lo esperes,
en el corrillo del patio, en el bar de la esquina, en el deporte,
en la salida del viernes, haciendo shopping, chateando,
¿sabes razonarles tu fe?, ¿lees buenos libros?,
¿acudes a medios de formación?, ¿pides consejo?,
¿te asesoras sobre pelis y programas?,
¿aprovechas el tiempo? ■
5
Lucha
contra tu propio fantasma,
esa bruja que hay en ti,
san Pablo lo llamaba hombre viejo,
la versión pesimista, cutre y resabiada de ti misma,
la plasta del pecado original,
siempre quejándose, ¡qué difícil!, ¡no vale la pena!,
me gustaría pero no puedo, ay,
el ambiente está crudo, si usted supiera,
ya me conozco,
¡mentira!,
esa no eres tú, tú eres increíble, créetelo,
eres maravillosa a los ojos de Cristo,
no recules ante tu grandeza,
sólo te conoces cuando mejoras,
te renuevas, te reformas, te corriges, te entrenas,
siempre en constante superación,
el alma en chándal,
quien ama no para quieto,
quien ama se curra, quien ama se zurra,
vale ya de renquear,
es preciso nacer de nuevo (Juan 3),
la conversión es aquel parto doloroso y gozoso,
sin epidural,
en que madre e hija son la misma persona,
plántale cara a tu pereza,
que te empequeñece, te amuerma, te idiotiza,
contra tu vanidad, tu orgullo, tu sensualidad,
la pringue del pecado,
o eres humanísima o eres humanorra,
si Cristo no es tu libertador tu egoísmo será tu carcelero,
el día que digas “es que yo soy así” te saldrá la momia que llevas dentro,
quien no ama se amojama,
como la mujer de Lot,
¿te examinas cada noche?,
antes de dormirse hay que convertirse,
¿haces propósitos?,
¿recomienzas una y otra vez con optimismo?,
¿te niegas a ti misma con una sonrisa?,
Jesús tú sí, yo no,
vengapués, just do it, hazlo real,
vive de esperanza y no de experiencia.■
6
Ama la cruz,
bella, victoriosa, soberana,
la marca del cristiano, tu sello,
trono triunfador de Jesús,
recíbela sonriente cuando llame a tu puerta, toc toc,
en forma de disgusto, cansancio, chasco,
lo que agobia, lo que irrita, lo que impacienta,
welcome, adelante, Señor,
estás en tu casa,
gracias por asociarme a tu Redención,
quien quiera venir en pos de mí
cargue con su cruz y me siga (Mt 16, 24),
tu cruz normalmente es formato bolsillo,
astillicas menudas, ojo no las pierdas,
no lo fastidies torciendo el morro,
cuando ayunéis no os pongáis tristes como los hipócritas (Mateo 6),
hijaporfavor no pongas cara de ajo,
¿no ves que es Dios puliendo tu alma,
el Espíritu Santo, ras ras, lijando tu roña?,
¡cuenta con la Cruz!,
sin ella no se entiende nada,
tu vida no tiene ni pies ni cabeza,
te vuelves amargada, retorcida y puñetera,
¡sé optimista!,
a la luz de la Cruz todo encaja, tiene sentido, rinde amor,
¡recicla tus contrariedades!,
ofrécelas por la Iglesia, tu familia, tus amigos,
son oro puro para saldar tus deudas,
¿con qué pagarías, si no, la factura de las almas?,
habéis sido comprados a gran precio (1 Corintios 6),
por eso ponte a punto,
mortifícate en las cosas pequeñas, ya sabes,
cumplir el horario, ayudar en casa, ordenar tu cuarto,
ahí te quiero ver,
¿crías michelines en el corazón llenándolo de caprichos?,
que si tele, que si sofá, que si picoteo,
que si compras, que si móvil, que si tuenti,
¿te has vuelto foca espiritual, rechoncha y cansina?,
embellécete a los ojos de Dios,
hazte digna de él,
arrímate a la Cruz como las santas mujeres,
como María Santísima a los pies de su Hijo,
atraerás la gracia, como antena parabólica,
te volverás magnética, poderosa, tierna,
tú te volverás más tú. ■
7
Sé amiga
de verdad, no en plan interesado,
buscando sólo pasarlo bien, tu propia satisfacción,
mendigando afectos, consuelillos egoístas,
que te hagan caso, que te miren, que te escuchen,
amistad parasitaria y amorfa,
¡ensancha tu corazón!,
hazlo potente y delicado como el de Cristo,
nadie tiene amor más grande que el que da la vida por sus amigos (Juan 13),
sé leal con ellos,
haz que maduren, superen sus crisis, se conviertan, sean felices,
¡Dios te los ha encargado!,
don y tarea,
no los traiciones por miedo a quedar mal,
por comodidad, por cobardía,
no te camufles pasivamente en el mogollón,
amistad camaleónica,
que se mimetiza en el ambiente para ahorrarse el mal trago,
el testimonio coherente, el consejo espinoso, la corrección fraterna,
vaya morro,
que os améis unos a otros como yo os he amado (Juan 13),
a lo grande,
fuera fobias, prejuicios, manías, rencores, celos, envidiejas,
¿quieres a tus amigas como son, con sus defectos?,
¿perdonas y pides perdón?,
¿dices las cosas a la cara,
sin ceder a la murmuración y el comadreo?,
¿eres rebotona, picajosa, chinchorra, lianta?,
¿le ríes la gracia a la frívola, a la borde, a la superficial?,
¿formas grupúsculos herméticos?,
ojo con los enganches sentimentales, las dependencias afectivas, las amistades-cadena,
¿no ves que te empequeñecen y esclavizan?,
¡agranda tu corazón!,
¡hazlo potente, de muchos megas!,
modélalo según el de Cristo,
para que todas tus amistades te lleven a Él,
fundamento, garantía y fin de todos los amores. ■
8
Muévete,
influye a tu alrededor, haz apostolado,
o cambias el mundo o el mundo te cambiará a ti,
estás llamadísima, elegidísima, señaladísima por Cristo,
instrumento suyo para apalancar las almas,
vosotros sois la luz del mundo (Mateo 5),
y hay que llegar a todos,
a los tristes, a los aletargados,
a los que van a la deriva como un iceberg,
a los desfondados, a los empantanados en la impureza,
a los que confunden felicidad con facilidad,
a los que arrastran la cadena de sus días, amargados, aburridos,
disimulando el vacío con amores rastreros,
a las que malbaratan su intimidad en el rincón de un tugurio,
sin más expectativa que la resaca matutina,
el vómito dominical,
y todo con la complicidad de nuestro conformismo,
de nuestra decorosa inhibición,
de la cobardía políticamente correcta,
fuego he venido a traer a la tierra (Lucas 12),
faltan cristianos intrépidos que avancen con paso firme en todos los ambientes,
¿eres esa cristianilla mediocre, acomplejada y modosita que no se mete en líos?,
¿o es tu fe rompedora y escandalosamente coherente?,
¿se te nota dondequiera que estés?,
lo que os digo en la penumbra proclamadlo a plena luz,
lo que os digo al oído, pregonadlo por los terrados (Mateo 10),
¿compartes con tus amigas tu mejor tesoro, o sea Dios?,
¿les pegas tu amor a Jesús?,
¿les hablas de su doctrina candente y salvadora?,
¿en clase, en el bar, en la disco, en la cancha, en el cine?,
¿son tus conversaciones hondas, comprometedoras, quirúrgicas, sinceras?,
¿das esos consejos que escuecen pero curan?,
el amor de Cristo nos apremia (2 Corintios 5). ■
9
Afina el corazón,
violín de tus sentimientos,
bodega de tu intimidad,
donde resuena la música de Dios,
donde habitan misteriosamente las personas que amas,
no lo llenes de escombros,
que bastante tiene, el pobre, con la herida del pecado original,
que lo inclina a la concupiscencia, al temor y al egoísmo,
esas cucarachas siempre pululando,
¡purifícalo!,
vacúnalo con la gracia,
aliméntalo con la verdad,
edúcalo con la virtud,
si no, ¿cómo podrás darlo en el amor?,
si no sabes dominarte, ¿cómo podrás entregarte?,
sin pureza de corazón ¿cómo conocer al prójimo,
sobre todo a los chicos,
entrar en sus corazones,
entablar una relación?,
dichosos los limpios de corazón porque ellos verán a Dios (Mateo 5),
¡recógete!,
no te vuelques hacia fuera,
los sentidos sueltos, como chucho callejero,
husmeándolo todo,
escaparates, revistas, pantallas, basura audiovisual,
la vista desparramada, ávida de sensaciones,
huye de esa cárcel falsa y estrecha,
¿no ves que es fuente de tentaciones?,
mi mundo es pequeño y en mi corazón pedacitos de hielo,
¡recuerda tu vocación!, lo tuyo es el Gran Amor,
me ha vestido un traje de gala y me ha envuelto en un manto de triunfo,
como novia que se adorna con sus joyas (Isaías 61),
no despilfarres tus tesoros,
corta con los amores esdrújulos,
fáciles, frágiles, volátiles, episódicos, epidérmicos,
y sobradamente etílicos,
que falsifican el lenguaje del amor, o sea el sexo,
y te dejan tirada como un trapo,
el corazón como quiosco de chucherías, Rico Rico,
¿dónde está tu dignidad?,
si no te va esa marcha, ese sitio, ese baile, esa peli, esa conversación, ¡dilo sin tapujos!,
¡plántate!,
sé femenina 100x100, sé romántica,
y por eso mismo vive la pureza,
que potencia el amor
y le da hondura, lirismo y autenticidad,
en cuestión de amor hay que ser exigentes,
novia para uno, femenina para todos, muñeca para nadie. ■
10
Ponte guapa,
arréglate, ten estilo,
que todo el mundo note tu fe y tu alegría,
¿acaso no eres luz del mundo?,
y además mujer,
la Iglesia resplandece en tu cara y en tu porte,
eres su signo,
¡esta es la morada de Dios con los hombres! (Apocalipsis 21),
protagonizas la gran película de tu vocación,
no olvides tu papel,
escoge bien tu look,
sácate cada mañana, frente al espejo, tu versión más auténtica,
ésa que Dios ve desde la eternidad,
autoconocerse, autosuperarse y expresarse, ¡eso es arreglarse!,
que no te vista Hollywood, ni la tele, ni el ambientillo ramplón de la calle,
tú no eres así,
mentira andante, muñeca de teleserie, pin up, reclamo machista, florero de salón, bella pero falsa, maniquí de plástico,
vestirse es definirse,
si no vistes como eres acabas siendo como vistes,
¡resístete a la vulgaridad!,
no te dejes imponer cánones y modas,
ten criterio en el mundo audiovisual,
asesórate,
rebélate contra el consumismo y la marquitis
que vacían el corazón y el bolsillo,
mírate en María, espejo y escaparate de feminidad,
Mujer Nueva,
y conocerás tu auténtica identidad,
tal como eres a los ojos de Cristo,
bella y maravillosa. ■
